Suelos laminados vs suelos de vinilo
¿Va a cambiar el suelo de su casa y está indeciso? ¿No sabe cuál es la mejor opción?¿Suelos laminados, tarima flotante o suelos de vinilo?¿Cuál elijo? ¡Tranquilo! Sabemos que renovar el suelo de su hogar es una decisión complicada que requiere tiempo y paciencia; hay muchos materiales entre los que elegir y una gran variedad de colores y diseños.
En este post le queremos facilitar, en parte, el proceso de decisión y, por ello, le mostramos las diferencias existentes entre dos de los tipos de superficies más usadas en la actualidad: los suelos laminados y los suelos de vinilo.
Aunque existen diferencias muy importantes entre los dos tipos de suelos, ambos comparten algunas características, entre ellas, su facilidad para la instalación. Gracias al sistema patentado Uniclic de Quick-Step tanto los suelos laminados como los de vinilo son sencillos y rápidos de colocar. Será como un juego de niños.
Características de los suelos laminados
Los suelos laminados son pavimentos sintéticos con la apariencia de la madera. La mayoría de los laminados están formados por una cubierta superior resistente al desgaste; debajo de esta, se sitúa una capa de diseño, compuesta por una imagen fotográfica de alta resolución que imita a la madera natural; aparece, después, una tercera, realizada en fibra de alta densidad. En último lugar encontramos una capa estabilizadora que garantiza una correcto nivelado.
¿Qué son los suelos de vinilo?
Los suelos de vinilo constan de cinco capas diferentes. Seguramente, lo más destacado de este tipo de pavimentos sea su capa superior, que posee un innovador revestimiento de poliuretano que la hace muy sólida frente a golpes y arañazos. A ello se añaden diversas tecnologías que lo convierten en un suelo resistente frente a la humedad, las manchas y la suciedad. Además, su gran variedad de diseños en piedra y madera se adapta a cualquier espacio interior.
Diferencias entre suelos de vinilo y laminados
Los suelos laminados y los suelos de vinilo divergen en algunos puntos. A continuación, le mostramos en cuáles.
Resistencia al agua. Cualquier suelo de vinilo es 100% hidrófugo y, por ello, apto para entornos donde el agua está muy presente, como el baño o la cocina. Los niveles normales de humedad no son un problema para el vinilo. Sin embargo, en general, los laminados no son adecuados para las zonas húmedas, ya que el agua les provoca alteraciones en su constitución. Aunque en la última generación de suelos de Quick-Step, tanto en tarima flotante como en suelos laminados, tiene colecciones que presenta la tecnología Hydroseal. Está innovadora protección evita la penetración del agua en las ranuras del suelo y los convierte en una opción estupenda y sofisticada para su baño.
Resistencia al paso del tiempo. Pese a que ambos materiales son mucho más resistentes que la madera natural frente a los arañazos, los golpes…, la cubierta de poliuretano convierte a los suelos de vinilo en un revestimiento más sólido y duradero que el laminado.
Uso comercial. Los suelos de vinilo, debido a su alta resistencia y durabilidad, son ampliamente usados en los locales comerciales. Los laminados no tienen ese grado de dureza, por lo que no se recomienda su uso para zonas con alta afluencia de público.
Calidez y confort. En este punto el duelo lo ganan los laminados. Pese a la enorme evolución que ha sufrido en la última década el diseño de los suelos de vinilo, todavía no llegan al confort y calidez que ofrecen los suelos laminados.
Similitudes con la madera natural. Los suelos laminados son más precisos que los vinílicos a la hora de emular los productos naturales. Pero, en cambio, estos últimos presentan una gama ilimitada de diseños, entre los que podemos encontrar imitaciones del hormigón, del cemento, del mármol…
Si busca asesoramiento para decidirse, ya se apara suelos vinílicos, tarima flotante o suelos laminados, contacte con Quick-Step Valencia y le aconsejaremos sobre el tipo de suelo que se ajusta mejor a su hogar y a sus necesidades.